Hoy

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Septiembre es un mes de despedidas y encuentros, todo y nada sigue igual, la vida misma que nos interpela  siempre, parece hacerlo de modo especial en los cambios de temporada y en las encrucijadas que encontramos haciendo camino.  El adiós al verano se reviste de cierta nostalgia difuminada por la luz septembrina. Poco a poco vamos regresando a los lugares de siempre con más o menos  ganas de retomar la rutina que tantas veces desde la perspectiva veraniega aprendemos a valorar. Mientras deshacemos maletas y recolocamos  bártulos vamos recordando lo mejor de las vacaciones, esos momentos entrañables pasados junto a quienes más queremos. Olvidados ya el cansancio y los roces del quererse, el  próximo verano  volveremos a intentarlo. Conocerse, aceptarse, pasar por alto. Recuerdo una ocasión en que tras un portazo involuntario, la persona protagonista, con gran sentido del humor, aclaró: ‘¡He cerrado la puerta!’… Y nos hizo sonreír. Ahora, más que nunca, estamos ante las puertas abiertas de par en par a las mil vicisitudes de la vida. Siguen tiempos difíciles de guerra y paz, de persecuciones, de crisis y dificultades económicas. El día a día es lo mejor que tenemos para aportar  nuestro granito o montaña de arena, a ver si de una vez por todas somos capaces de conseguir un mundo mejor aunque  no precisamente de arena. Son muchos los castillos  abandonados a orillas del mar que las olas suelen acabar de borrar pero, verano tras verano, niños y mayores  volverán a construir. El comienzo del curso escolar es el pistoletazo de salida de esta nueva etapa en nuestro vivir. Alegrías y tristezas parecen haberse fundido con el calor del verano. El sol sigue alargando sus rayos. Luces y sombras. Es necesario tomar una buena perspectiva, aprender a contemplar cuanto acontece. La gente viene y va, cada uno de nosotros también. Familia, vecinos, amigos, compañeros de trabajo, de penas y alegrías.  Despedidas tristes y alegres encuentros. Abundan las mochilas escolares repletas de libros, cuadernos y lápices de colores. También hay muchas virtuales repletas de recuerdos y experiencias. Nuevas y veteranas ilusiones. De momento, seguimos teniendo toda una vida por delante. Si los cursos se aprueban en septiembre, la vida nos evalúa día a día. El más importante  <<hoy>> que nos ofrece  veinticuatro horas para volver a intentarlo.